jueves, abril 09, 2009


Francisco Peinado, pintor andaluz
Esta vez traigo a un pintor llamado Francisco Peinado (n. 1941) quien fue entrevistado por el poeta José Miguel Ullán (poeta que me llamó mucho la atención hace unos años, sobre todo en relación con la poesía visual y la poesía como artefacto, por ejemplo en su libro Ardicia) el 24 de marzo de 1982 para el periódico EL PAÍS. "La pintura se alimenta de libertad y amor al riesgo". Pues ahí va: libertad y riesgo.

A Peinado, premio nacional de Dibujo e internacional de Pintura (Cagnes-sur-Mer), le gusta llevar una existencia apartada y libre, al tiempo que, en su práctica pictórica, ajena a la rentable repetición, el riesgo es ley. No pertenece Francisco Peinado a ese grupo creciente de pintores en el que un atinado empleo de tics teóricos disimula la debilidad del producto: "Tengo muchas dificultades para expresar lo que deseo. Se crea en mi cabeza un torbellino incontrolable de ideas. Nunca he podido reflejar con exactitud lo que yo pienso". Pero sondea en su interior hasta decir frases muy preocupantes y extrañas: "La concentración no existe cuando ya se ha nacido concentrado como el llorar del búho". "(...) el pintor, al llegar a la madurez, ha de darle la espalda a la rutina". "Hay que arriesgarse para no caer en la repetición. No se trata de crear rupturas artificiales, sino de dejar que el trabajo anterior dé sus frutos, nos reconecte con la vida y recobremos la ilusión. " (…) creo que (mi obra) tiene mucho amor, que es muy cálida e incluso dulce. De todos modos, yo nunca he pensado en pintar para congraciarme con la gente, para que me den palmaditas en la espalda o me agradezcan que un cuadro mío entone con el sofá de su salita de estar". Si se le insiste sobre el aspecto agresivo de su pintura, Peinado acaba reivindicándolo: "A mí me gusta ser como soy, porque así me siento libre. No me agrada sentirme atrapado. Prefiero la distancia al mimo empalagoso, embrión de tantas traiciones". El único miedo de Peinado se halla en lo extrapictórico: "¿No será que los pintores tenemos algo de conejos? También estamos escondidos en nuestra madriguera, a la espera de que llegue un cazador de cuadros. Y nos escondemos, no vaya a ser que nos den un tiro o nos echen los perros encima. Si no vienen, piensas que no te quieren.

Y también encuentro en el Diario de Sevilla, mucho más cercano en el tiempo, del 1 de noviembre del pasado año, esto:

"Los galeristas han hecho durante los últimos años una política consistente en arrinconar a la gente de mi generación y sólo apuestan por los jóvenes. Pero yo creo que el artista se hace con el tiempo, especialmente el pintor. Así que pienso que esa política no es buena, aunque ellos crean que son unos genios y que los pintores son unos desgraciados. La pintura es constancia, mucha constancia: pintar, luchar, sufrir".
Respecto a la polémica por la exclusión de galerías andaluzas en Arco, el artista apunta que "es un tema complicado, pero creo que no es una decisión buena. Aunque en la década de los 80 participé en varias ediciones, Arco nunca me ha gustado. No se pueden ver bien las obras, hay demasiada gente. Pero bueno, ésa es una batalla de las galerías".
(Las ilustraciones provienen de las siguientes páginas: http://www.telefonica.net/web2/enriquecastanos/peinado4.htm; la segunda a http://www.arte10.com/noticias/propuesta-478.html.)

No hay comentarios: