sábado, marzo 05, 2011

De los dos huevos duros de los Hermanos Marx al huevo frito de Javier Krahe, por el profesor Ölson
 
Lo bueno de Krahe es que después no te puedes despegar, te escriben los amigos, los anónimos de Perú, y no te puedes despegar, por más que quieras, y dejas de escribir, y te emborrachas y te fusilas y plagias a Rilke y escuchas los cinco sentidos y te desnudas y te vas a dormir... ¿dónde se habrá metido esta mujer?
¡un huevo frito!

4 comentarios:

mercedes dijo...

sí que engancha sí, este krahe.

ya tienes curro..., así el otro día pagaste un montón de cervezas, y yo pensando "¿este chico? mañana no come"

Anónimo dijo...

ATRACO AL FURGÓN DEL RINOCERONTE
(ESTILO KRAHE)

las piedras de mi tejado en dunas
de adobe acequian el tragaluz
que yo mismo me he ido tirando
las piedras apuntando los números
dados sobre la mesa del Mulhacén

¡fantasmas con gafas diana de dardos
ataurique del follaje otoñal
a cuerpo de monarca amarillo
espinacas secas del escarabajo
desmayado de mi computadora!

¡berenjenal de un arte antiguo
maromas del crucero con safari
recinto amurallado de color
afilado como un lapicero
jinete en un paisaje japonés!

¡horno de pan que moja el huevo frito
del sol sobre campo de arroz hasta
el tobillo un río de peces los pies!

y ahora me voy a picar el ajo
para echarle el aliento al vamp
(bis)

jls mrl

alf ölson dijo...

No, querida Mercedes, el día aquel que pagué no tenía ni curro ni visos de tenerlo. Me dio por ahí, simplemente y mira tú que sonó la flauta.

mercedes dijo...

el dinero atrae al dinero, dijiste (mira tú);
y que las cervezas atraigan más cervezas.

a tu salud! y que sean muchas más!