miércoles, marzo 23, 2011

Stefan Zweig, El mundo de ayer VI

Una noche en La Aguja estaba petado hasta las trancas el bar un tipo en una de las mesas discutiendo con su novia, o lo que creo que era. La chica se levanta, y al hacerlo intento apartarme pero de tan petao que estaba solo me aparto nada. Ella desaparece en el pasillo, entre codazos, rumbo al baño. El tipo se dirige a mí y me dice con muy mala hostia, con una cara de "que casi te fostio" que Hitler llamaba "espacio vital" a blablabla (lo que no le había proporcionado a aquella chica) y hete aquí que Zweig dice que la expresión la acuñó su amigo Hanshofer que a través de Hess llegó hasta el mismo Rodolfo y este la utilizó para su discurseo y posteriores invasiones. En fin, que hay que tener buenos asesores. Y apartarse pero también saber de dónde vienen las cosas y el por qué y el cómo al final lo que es tuyo no era tuyo y lo que no es tradición es plagio y tú la llevas, la pocho yo, Polipoti y Epinene*. (Jugar a poner palabras extrañas en google a ver qué te sale, por dónde entras a quién llegas por dónde sales.)


*Epinene. Palabra que me inventé cuando era niño.
(Es decir, la definición -disculpen la redundancia- es esta: Palabra que me inventé cuando era niño.)

No hay comentarios: