lunes, agosto 29, 2011

Un breve paréntesis en todo esto

Bueno, pues he bajado a comprar tabaco a la calle pero antes me he acercado al cajero a sacar dinero porque no me llega con mis pantalones de raya pirata, mis zapatillas de esparto negro y la camiseta que dice "L´amour beau come ça!" roída como un cucaracha aplastada y sin colores mientras ahora que estoy fumando y escuchando a un tipo en la radio hablando sobre hollywood pisando cada una de las canciones pero hablando de las chiquillas que van a la meca del cine pero como dice el documental de Isaki con Ava Gardner se tenían que "relacionar" con actores o con productores y tal como que se casó Ava con Mickey Roonie, por ejemplo, un ejemplo de los buenos, ahora me entero que es Bigas Luna y parece el cura en el programa de la cadena del wáter, no, no era el cura, no sé, ahora no me acuerdo, es que yo no lo escuchaba, lo escuchaba mi hermano los viernes por la noche por ejemplo, cuando hacían el programa de la película, echaban una película y se ponían a comentarla, y toda la pesca, y te descojonabas o no, o era un peñazo, lo cierto es que lo cerraron, como las radios libres que se llamaban y tuvieron que cerrarlas porque eran, algunas como muy libres y estos se metían con la iglesia porque qué coño, si salíamos todos de los confesionarios con unas collejas, veían, yo no, yo era muy bueno, y creían en esa mística como los chavales estos que han pasado en madrid, primero les venden su mística y luego les calzan su jerarquía, es como el ejército pero para los sensibles, para los que ven ese rollo de paz y solidaridad que luego pues es clerigalla y cálices de oro, y mucho más, y cómo perdían su poder, la jerarquía no, y tenían que presionar por algún lado y así seguían y así siguen, con la bendición y palabras muy hermosas y tal, y el reencuentro con la espiritualidad, y tal, y que si no hay de esto pues se va todo al güano y es verdad, sin ironía, pero a mi me da que lo han ensuciado un poco como todo y que han extirpado el cerebro y el hígado y el páncreas y la próstata y la matriz y como un saco vacío nos lo venden después de haber vendido las vísceras y dicen "He ahí el ser", y yo digo solo "He ahí vuestro espantapájaros"  soy un pecador, soy un soberbia, la soberbia es un pecado capital. Sí.
¡Ah!, se me olvidaba: cumplo 30 años en madrid, 29 agosto 1981-29 agosto 2011. 

martes, agosto 23, 2011

El dios Pan, Diógenes, los cínicos, la secta del perro, los perro-flauta y Alejandro Magno

Es duro darse cuenta de que el tiempo no pasa en balde, y de que éste, por más que lo queramos olvidar, vuelve a resonar como si de un eco o un viejo instrumento se tratara. En este caso podríamos hablar de la flauta del dios Pan, aquel que, con pezuñas de macho cabrío, cruzaba las riberas al encuentro de la ninfa Siringe de quien se había enamorado (en inglés ´syringe´ es jeringa; en castellano tiene también la acepción o representa las cuerdas vocales de las aves) y a quien por fin, y gracias al intercesión de los dioses, pudo abrazar en forma de caña con el que Pan decidió hacerse una flauta (también llamado caramillo de los pastores) para que le acompañase allá por donde fuera, haciéndola sonar. Que mejor que crear música con el cuerpo amado, es decir, ser música junto al amado. Pero no nos pongamos estupendos.
Luego de esta breve reflexión sobre un instrumento, o más precisamente, sobre cierto parecido razonable a una flauta, veamos la figura del llamado, en la Grecia clásica, kynikós o perro.
Pues bien, de aquí proviene la palabra "cínico" que se acuñó en esta época, ya lejana, a raíz de un personaje llamado Diógenes el Cínico. Hijo de banquero y falsificador de moneda en sus años mozos (lo que supuso que matara al padre, como bien diría Freud, o como lo digo yo ahora) su vida fue una búsqueda de la virtud, del intento por desprenderse de los elementos superfluos que nos llenan la casa de cachivaches y los bolsillos de naderías. Un desprenderse de lo superfluo para saber qué es lo que realmente se necesita. He ahí donde radica (de "radical", otra hermosa palabra que los cretinos intenta afear) su virtud. Este tipo que despreció a Alejandro Magno o que vivía en un tonel o que al ver a un muchacho beber con las manos arrojó al suelo su escudilla o que rechazaba, y no con buen humor, a todo aquel que quisiera ser su discípulo con cajas destempladas, es el que aparece en el cuadro de Rafael Sanzio, postrado, tirado en las escaleras mientras arriba hablan, supongo que peripatéticamente, es decir, haciendo círculos alrededor de la Academia, luego como podría ser en una plaza, el santurrón de Platón y el metomentodo de Aristóteles. Diógenes inició, antes de que llegara el cristianismo ("Jesucristo era guapo, eso lo explica todo", como bien vi hace un par de años escrito o grafiteado en un lado del Puente de Toledo) un modo de vivir lejos del lujo y de lo superfluo, cercano a la Naturaleza, como madre de todos nosotros, acompañado con un candil buscando al ser humano.
Regresando al pasado siglo, recuerdo aquellas noches con el bueno de Valentín en un bar de Lavapiés cuando nos contaba, entre jarra y jarra de cerveza, sus encuentros con los perros-flauta de Cuenca o de aquí de Madrid, allá por el 2000. De los de Madrid aún guardo la imagen de los que se colocaban enfrente a la tienda de discos Metralleta, en la pza. de las Descalzas, perros-flauta que no tienen nada que ver con los de ahora pues aquellos (sin desmerecer ni a unos ni a otros, no voy por ahí, joder) eran más bien pankis talluditos y los de ahora son de un jipismo rasta juvenil...., por definir pronto y mal. Los primeros siempre te pedían mientras tocaban la flauta un par de notas y diciéndote si tenías algo para la música o para vino, como un dios Pan que se preciase, con su perro merodeando o estirado en el suelo si hacía calor, un perro sin collar, por supuesto, pero siempre muy tranquilo y pillando de aquí o de allá. Una vida relajada y sin ninguna prisa por nada.
Así, creo, que es la vida de los perros-flauta que de alguna manera envidio pues, sin ensalzar a unos y vituperar a otros, es un comienzo para un análisis de la virtud. Por otra parte, me es completamente indiferente cómo vivan los perros-flauta, esto es solo una manera de decir a los "alejandros" que se aparten, que nos ocultan el sol.

lunes, agosto 22, 2011

Diario de agosto

Concentrarse en la escritura, escribir, es también transmitir tranquilidad.

Leer a W. Benjamin en estos tiempos es alcanzar cierta serenidad ante lo que ocurre, y se desvela en un línea que no encuentras sino que te encuentra. (Como todo gran clásico.)

¿Mantiene la piedra en el aire su centro? ¿La mano que la arroja lo ha perdido?

sábado, agosto 13, 2011

Diario de agosto

            (Dedicado a Aníbal Núñez)

El hechicero.
Las diez de la mañana
del hechicero.
El búho. El azul cobalto
del hechicero. El vientre
del hechizo. Jueves del hechicero.
El paseo del hechicero
por entre los chopos. Su escritura
de pasos. Tintineo de las cuentas metálicas del hechicero
a su paso por
donde no mienten sus paseos.
El hechicero con sus plumas,
sus labios, los labios del hechicero
no hechizan.

(La hermosa palabra,
la de "hechicero".
¿La hecho al cero?,
etcetecero.)

*

viernes, agosto 12, 2011

Diario de agosto

He terminado el libro del tipo que sale de un psiquiátrico para llegar a un pueblo y contarle al alcalde que él (es decir, el tipo que sale del psiquiátrico, que llega al pueblo que le cuenta al alcalde que...) está como una chota. He recordado que la tía de una amiga mía hablaba con su tortuga que tenía la misma edad que yo. (Parece una jodida ecuación pero no lo es). Se la ponía delante y le hacía "fis-fis" y ella hacía lo mismo. (¡La tortuga, joder, la tortuga...!, ¡maldita semántica!). Así estaban. Isabel me decía: "Mira, ven... ¡pero acércate!" (siempre parezco un poco lelo ante extraños y familiares, por supuesto de otros... incluso hasta de los míos si se me apura, me refiero a los míos-míos, de primera línea) y comprobaba cómo la tortuga, la tía, mi amiga, el tío de mi amiga y hasta el perro que murió poco después, se quedaban anonadados por esta comunicación entre galápago y mamífero.
Esto lo podría contar en otro poos o pliego, pero no me da la gana. Mi madre me contó ayer que cuando estaba sentada ocupando un banco de un breve parquecillo vinieron tres chavales que rondaban los catorce años. Estos saludaron muy educadamente pero al ver mi madre que uno de ellos estaba fumando le reprendió.  "¿Y tú te crees que eres lo suficiente mayor para hacerlo?". A lo que otro, no el que fumaba, le dijo a su colega fumador algo así como: "Enséñale eso que tienes para que se dé cuenta lo mayor que eres". Mi madre reaccionó y les dijo que la estaban molestando. Los tres chicos se fueron. Mi madre termina de contármelo. Se hace el silencio. La miro, nos miramos. Continúa el silencio. Ella, por supuesto, que espera que le diga algo así como "niñatos hijosdeputa" "cerdos malparidos" y toda esa zarandaja pero mi mente ocupa únicamente los disturbios de Londres y de las ciudades adyacentes (y no tanto). Luego pienso sobre los hipócritas de los políticos británicos que se atreven a excretar por sus bocas (como acepción metafóricoprimera de la RAE) aquello de si sus padres no les han enseñado a diferenciar entre el bien y el mal, si no les han hablado de respeto... de... de... No voy a defenderlos. No,ellos se lo han buscado pero creo que les vendría bien (si no son unos hipócritas) un buen observatorio sociológico para que les indicara los posibles peligros que una administración, cualquiera que esta sea, pueden llevar a cabo. ¡Bah!, parezco un jodido loro, analista de tercera. Lo malo es que si he escrito esto quiero decir lo contrario... No, tranquilo, no quieres decir lo contrario, es solo frustración.

(Sigo sin poder volver al Foro)

Diario de agosto

Me he quedado sin dinero y ahora no puedo volver a Madrid. Me quedo aquí. Tengo que volver al trabajo el martes pero no puedo, tampoco quiero. Esto no es nuevo, más bien es habitual. Aquí se duerme muy bien. Apenas hace calor aunque hoy el día ha sido especialmente caniculante. Me he desayunado un libro de E. Tizón y ahora ando con J. Tomeo que dice que habla con los animales. Tizón habla de un cuchillo en la espalda, que todos llevamos un cuchillo en la espalda... ya saben a lo que me refiero, ¿no? No, no saben a lo que te refieres.
He visto junto a la Cartuja a unos tipos en un corro diciendo Aleluya muy de bajinis. He descartado que hubiese llegado el Apocalipsis. Uno de ellos me ha mirado. He seguido mi camino hacia Cardeña, a paso rápido, oliendo los pinos. He pensado en las sectas, he pensado en ese señor que viene con un séquito enorme y que dicen que hemos pagado todos los españoles y que va a reportar regocijo espiritual y dinero a las arcas de Estado. Menos mal que lo ponen en arcas, es lo único que se salvó en el Diluvio.

jueves, agosto 11, 2011

Diario de agosto

Mi madre desparramada en el sofá ve cómo se ha rapado la cabeza Robert de Niro y camina dando saltitos como una pajarillo. Mi madre se ríe y me dice: "¡mira, mira cómo se rapado la cabeza!, ¡mira cómo le ha quedado el cogote!", y... "¿tú esto ya lo conocías, verdad?". Yo me encuentro leyendo detrás de la pantalla de la televisión. Me levanto del sillón lo suficiente como para descubrir a Robert con sus trescuartos verde de camino a un tipo vestido de negro. Un tipo con gafas de sol de las que ahora todo quisqui lleva y que son molonas. Un tipo ridículo. Ridículo y alto. Robert le hace unas cuantas preguntas y al final le acaba tomando el pelo... "Uhmmm... ¡oiga!, me ha dado un código postal de seis cifras". Y Robert con su cínica sonrisa le contesta algo así como disculpe lo habré confundido con mi número de teléfono. Claro que el tipo de seguridad se queda con su jeta, con la jeta de De Niro, y al final ve al colgao de Robert al cabo de unos días, en otro absurdo mitin de buenas intenciones y llamarnos pueblo y toda esa mierda que en un púlpito, perdón, en un atril con tarima, suena a sangre. Por una parte escucho medianamente los parlamentos de Robert de Niro con Jodie Foster o Harvey Keitel que hace un papelazo (a no ser por la primera escena que interpreta en la película en la que la caga con el puto pañuelo porque es una sobreactuación, rollito soy muy funky y malote a la vez, pasándoselo continuamente por la boca como si fuera bobo) y por otra leo un bestseller donde aparece Manuel de Alvear o Ignacio o el bueno de César. Un novelón de casi mil páginas que no sé si me tragaré, porque a veces es tragárselo.

lunes, agosto 08, 2011

Kasumi

Ella no me buscó.
Pero yo tampoco la encontré.
Las personas de su alrededor
se transformban a su paso.
Sus largas trenzas negras
su mirada altiva hacia el cielo,
el paseo doblando las rodillas, piernas,
las grandes avenidas,
cómo alzaba el parasol
para dejar pasar a los que cruzaban con ella,
ya sea andando o en bicicleta,
su interés por aquel hombre
que se arrojó a la calle,
la enorme y musculada esquina / espolón a su
frágil espalda lágrima
la línea de su cuero cabelludo
su espalda ¿te vas?
Junto a la fábrica un sábado de mañana luminoso diminuto
como su paragüas.
Ha terminado el tambor.

25 / 7 / 11

Justo desde aquí arriba, justo aquí, desde aquí se ve un abrigo de invierno, una esterilla, una bolsa de basura negra rellena hasta arriba donde sobresalen un par zapatillas de deporte; desde aquí, cartones cada 3 o 4 metros, detrás de la valla de granito, pero desde aquí, ¿sí?, desde aquí arriba no hay nadie que vigile sus pertenencias, un carrito plegado de un niño. Desde aquí arriba, sí, sin que nadie lo vea pero desde aquí, desde aquí arriba. Al otro lado de la pared de granito que apenas levanta un metro del suelo, la habitual estampa de un día laborable por la tarde en un jardín con tierra y con columpios. Madres y niños incluidos.

*                *                 *                *            *

El bus llegó a su última parada.
Los viajeros habían caído en un profundo sueño, en la sima inexplorada de sus conciencias.
El conductor temió despertarles.

28 / 7 / 11

Tengo la tendencia
cada ver más
de abrir los paréntesis.
Es feo que entre la palabra y el signo ortográfico
no haya un espacio.
Como si a un ser humano
lo metieran en su caja a calzador.

*                *                

Ataúd suena como si se desplomase sobre la tierra en el hueco allá abajo.
("allá abajo" suena alto, abierto y azul)


*               *                  *                
¡Qué angustia ser paréntesis!

*                *                 *                *            

PA              RÉN    te   sis
Las olas en el mar
al nadar a braza sobre ellas.

*                *                 *                *            *
¿Bajo el signo de Rimbo?

Toda palabra vibra
interiormente
(las cortinas de tafetán o de terciopelo)
por eso el ritmo
constante/continuo
de la Poesía
aunque no quiera ser
ni siquiera quiera ser
ni ser.

*                *                 *                *            *

No son comillas.
Empieza a llover.

*                *                 *                *            *

127

Aquel hombre saca su 127 marrón del garaje.
Plaza de Lavapiés matrícula de Madrid de hace más de 30 años
cada sábado por las mañanas
a esta misma hora
con su enorme volante
un paseo por la sierra
un breve paseo
su 127 apenas alcanza los 100 kilómetros a la hora
seguro en 1977
matrícula de Madrid
y la ley de la luz

ahora que es verano
que no cambia
que perfila exactamente
como aquel día
a los objetos.

4 agosto 2011

La voz ésa
en el bus dice:
"Próxima parada:
Circo Práis con Ronda de Valencia..."
"No es Práis, es Price" -digo en alto
(pero creo que nadie
me ha oído, nadie escucha
no estoy loco,
tampoco quiero molestar
la gente va a sus trabajos disciplinadamente...)
Lo ha pronunciado como Vincent Price.
Y luego oigo el cuchicheo bajito
de la misma voz,
no sé si lamentándose,
o estropeada.

lunes, agosto 01, 2011

Stefan Zweig, El mundo de ayer XII

El miedo al otro o lo mucho que se viaja.

Este blog cumple 6 años

Como el que no quiere la cosa.
Una tarde en la que estaba no currando porque casi no había curro, rodeado de pequeños artefactos denominados portátiles que tenían conexión a Internet (pues trabajaba en una empresa de marketing que se dedicaba a sentar a todo tipo de personas -señores y señoras en su mayoría- ante un ordenador para que ellas mismas realizasen su propia encuesta) me vino a la cabeza eso de un blog y trasteando y pasando del desánimo, de lo que te hace pensar "menuda bobada", y "pero bueno me voy a entretener un rato" o "y esto... ¿de qué palo va?", me puse a configurar una cuenta de blog y así que salió la historia.
Por supuesto que el nombre se me vino a la cabeza porque por aquel entonces aún recordaba lo que era hacer una revista en papel (me acuerdo de un tipo de Granada que vino a mi facultad, al Edificio A que es donde me encontraba allá por el 94, para un Congreso organizado no sé si por los alumnos sobre revistas de creación o algo parecido -disculpen mi mala memoria- y me enseñó un papel DINA4 doblado en cuatro partes que se llamaba, o algo parecido AZEMOS ARTE..., es decir, un grupo de chavales que se daba el gustazo de hacerse una revista o un fanzine doblando un papel o montando un taller para los críos en plena feria del libro de Granada, como él me explicó, entre otras cosas. A mí me gustó la idea, era mucho más llevadero, menos trabajoso, menos depender de nadie y menos de la pasta porque había ideas y ganas, así que le imité el formato al principio y sacamos de extranjis los ejemplares en el curro de una amiga llamada Magdalena).
Luego, volviendo a lo dicho, por el hecho de recordar aquel Noctívagos en papel (que es una palabra muy española, un cultismo, vaya, porque todavía hay quien duda de que esta palabra aparezca en la RAE) o cómo se hacía una revista en papel me puse a elaborar una "revista" en electrónico, es decir, tal como una web. Sí, me apetecía tener una web y es esto lo que surgió. Además está todo eso de los ancestros de los pliegos de cordel, por poner un poco de historia medieval a esto. Vamos, que el blog en español podría llamarse "pliego" y a nadie se le caerían los anillos sobre el teclado o las pelotas o las tetas al suelo.
Pues bien, era el absoluto anonimato, puesto que nadie la visitaba pero funcionaba como un cuaderno de notas, una libreta virtual, un diario de ruidos en mitad de un desierto de chispazos eléctricos, de fosfenos, de levísimos destellos en mitad de la nada que fue, ha sido y será ya casi todo esto de Internet. Así que hasta hoy. Hace unos pocos días escribí en mi libreta física "MY BLOG IS MY BOOK". No pido mucho... escribir en un papel sin rayas, como diría en buen Veneno de Kiko.
Cienes y cienes de gracias a todos por vuestras visitas y vuestros comentarios. Sí, de corazón, incluso por vuestras palabras anónimas porque esto empezó así, también como un anónimo y siguió de esta manera durante mucho tiempo aunque luego nos hayamos encontrando por los bares, los caminos, las calles... Y por supuesto, gracias a los que hacéis, construís, escribís, os mordéis, enseñáis... en fin, azéis arte