¿Censura en la escuela pública?

He recibido un correo de mi amiga Elisa sobre la escuela pública (ella es profe de secundaria) y sobre el interés por prohibir cierto teatro español de la década de los años 80.... antes no se explicaba la literatura de la guerra civil, en concreto Miguel Hernández o Blas de Otero por "no herir conciencias" o la obra El Público de Lorca, en la universidad (esto lo digo por propia experiencia), por su tratamiento de la homosexualidad, ahora parece que son otras...
Por otra parte, ayer en Twitter se habló de que a ciertas personas no se las dejó votar con tranquilidad porque llevaban la camiseta verde  (Pincha aquí)
Esto me ha dicho Elisa:

Me envía esto una compañera de Literatura:

Hola a todos, me pongo verde (en este caso de indignación). Os cuento. Me manda una compañera del instituto un correo para informarme de una reunión que ha tenido esta mañana en la Carlos III sobre la selectividad del próximo curso. No doy crédito. El coordinador les dice que este año la literatura de los años 80 no entra porque, literalmente, está vetada por al CAM. Sugiere que no se  deben leer ciertas obras de teatro en la adolescencia ni hacer partícipe  a los chicos de ciertas ideas en estas edades en las que son tan influenciables. (...) ¿Cómo se podría denunciar esto? Como siempre no hay nada por escrito, pero estamos sometidos a sus dictámenes, y luego hablan de la libertad ... 
(Parece ser que se refería, en concreto, a Bajarse al moro)

El año pasado el inspector nos montó un broncazo en el departamento de lengua porque nuestra programación de 2.º Bachillerato no hacía referencia expresa a Mesonero Romanos. Le explicamos que el costumbrismo del siglo XIX se trabajaba fundamentalmente con textos de Larra y él insistió en que el currículo de la CAM incluía expresamente a Mesorero Romanos. Argumentamos las lógicas exigencias de la Universidad pero él aducía que quien marca el temario es el BOCAM... Sospechamos cierto sesgo ideológico pero no podíamos creerlo. Ahora va quedando cada vez más claro. Es comprensible. Hace años, cuando trabajaba en Tarragona, vine de viaje de estudios a Madrid. Teníamos entradas para dos obras de teatro, pero una nos falló porque hubo una huelga contra la guerra de Irak y suspendieron las representaciones de casi todo, incluida la Compañía Nacional de Teatro Clásico. Cuando nos vimos en la calle con un montón de alumnos buscamos un plan B y milagrosamente consiguimos entrar en Las bicicletas son para el verano, cuyos actores sí trabajaron. Al acabar la representación se dirigieron al público para explicar que, dada la obra de la que se trataba, el mejor alegato contra todas las guerras era representarla. Mis alumnos salieron impresionados. Está claro que la cultura despierta conciencias, a eso se le llama "manipulación de mentes adolescentes". Los girasoles ciegos, La lengua de las mariposas, Las bicicletas son para el verano o Bajarse al moro, ya no son lecturas polítícamente correctas. Temo que nos espera una etapa de la historia realmente sombría.