sábado, agosto 31, 2013

Desaparición de la Galería Mainel

Hace aproximadamente un año, también en el mes de agosto, desaparecía la Librería Mainel, un lugar que posee una gran historia de hallazgos y seguramente de hermosas historias en torno al arte, la literatura, la filosofía, etcétera, lugar también de lucha y encuentros antifranquistas, lo que tratándose de Burgos les dignifique aún mucho más (tal como lo dice la Burgospedia).
Se pierde mucho en una ciudad cuando una librería cierra. Y mucho lo digo por una ciudad como Burgos que muy poco se preocupa, o nada, por la cultura no institucionalizada. 
Cada vez desconfío más de que Burgos pueda llegar a ser representante cultural de nada pues no cuida, no se preocupa de fomentar, de procurar la cultura no sólo en el centro de la ciudad, sino en los barrios que los tiene y muy populosos, y entre la juventud que desde hace años se le está marchando a Barcelona o a Madrid porque no encuentran trabajo a no ser en las fábricas que se hallan a las afueras (e imagino que ya ni siquiera eso). 
Burgos se preocupa, como ciudad conservadora que es, del "buen turismo" que le deja dinero por las atracciones históricas, culturales y gastronómicas que posee desde hace cientos de años. Pero hay que procurar que lo vivo también se desarrolle y crezca y encuentre su lugar en la ciudad, y es esto lo que no veo en esta ciudad. Sí, es muy positivo el que haya desarrollado un proyecto como el del Museo de la Evolución, pero... le falta encuentro con lo que pasa por la calle.

Ayer le preguntaba a un amigo qué es lo que está fuera del círculo institucional en Burgos y me habló sólo de unas personas que se agrupan bajo el nombre de Espacio Tangente, a los que, por cierto, denegaron recientemente una ayuda. (También sé de una persona que traía y llevaba a grupos extranjeros pero que todo se volvía muy difícil por el apoyo inexistente de las instituciones o también quiero hablar de la maravillosa librera que regenta la la librería El Espolón, con libros apilados hasta el techo y una curiosa esquina repleta de libros de poesía junto a la prosa rosa). 
En fin, la librería en la que entré por primera vez en el verano de 1991 y en la que compré, por veinte duros, la revista Trece de nieve, número 5/6, dirigida por Gonzalo Armero, ya fallecido, y que habla de poesía de los U.S.A., no debería haber desaparecido nunca.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

И сюда запостил.

alf ölson dijo...

El comentario que aparece arriba lo recibí ayer en el email. Lo he colocado, porque en la página de comentarios no ha salido, porque primero el Traductor de google lo ha visto como búlgaro pero al probar con el ruso me ha aparecido la frase: "Y aquí se ha publicado". Pues sí, aquí se ha publicado este breve y sencilla nota sobre la Galeria Mainel a la que visitaba cada vez que iba a Burgos. He querido dejar mi señal de algo bueno que se ha terminado. Así de sencillo.