jueves, julio 30, 2009

Manicomio del río Guadarrama

Desde que he salido del trabajo hay un río que me persigue y que pronuncia mi nombre.

No sé en dónde nace, si tiene padre o madre o agua que le da nombre y lo vierte hasta que podamos decir los ignorantes: "¡Río, río!", o "este es el nacimiento del río Guadarrama", por ejemplo.
Los ignorantes: los que confunden: arroyuelo, arroyo, cascada, manantial, hilo...
Desde que he salido del curro me dan ganas de pensar que no estoy triste (ni derecho, ¡ningún derecho!) porque se me ocurren estas cosas; tengo tabaco, agua, cerveza en el bar de la esquina o comida en la nevera.

2 comentarios:

uminuscula dijo...

te lo compro
un ratito al menos
no quiero privar al mundo de lo tuyo

alf ölson dijo...

¡¡¡¡Vale!!!!, un cigarro. Pero solo un poco, un par de minutos que se gastan las juntas.
Besos.