jueves, agosto 06, 2009


Ezra Weston (Loomis) Pound
(y parte de otro texto que quito del blog)

La verdad es que este texto es tan penoso, por supuesto no pienso llamarlo poema, es tan penoso que no tengo ni pijotera idea de cómo arreglarlo.
creo que voy a llamar a mi bisabuelo Ezra Pound y se lo comentaré porque ante el gran número de correcciones que él realizó en el libro de T. S. Elliot creo que me mandará a freír espárragos y lo siguiente será patearme el culo noctívago que tengo.
Y lo digo porque ayer terminé de leer una de sus biografías, sobre mi bisa Pound, y se ha saltado -el único "pero" que le pongo a Noel Stock, que es así cómo se llama el antólogo-, ha eludido no su estancia en España, de la que por supuesto habla, sino concretamente su paso por un pequeño pueblo llamado Medinacelli... sí, es obvio que sus estudios sobre la vida, obra y milagros del Cid (entre otros muchos personajes históricos que él investigó con enorme ahínco) le llevarían por supuesto a este gran pueblo en historia (con su alto de Trajano imponente a la entrada del mismo, me refiero siempre al viejo pueblo) y etcétera, pero la placa que aparece con los versos de Pound sobre una piedra es memorable. Por cierto guardo una foto que tomé en marzo de 2002 que dice "Aun cantan los gallos al amanecer en Medinaceli".
Por lo demás, esta biografía de la que seguramente hablaré largo y tendido (también atenderé a su rechazo a la usurocracia, término que acuñó a él para denunciar el excesivo interés cobrado por bancos y otros, y que, para nuestra desgracia ya vivimos y ya sufrimos, donde el valor que se le ha de dar a la moneda es el valor que tiene y he ahí donde se habla de la "fuerza de trabajo" que es la verdadera creadora de riqueza y no la especulación, o ningún hombre ha de nacer con deudas, etcétera.) es plenamente recomendable, y lo repito porque no es una biografía que tome partido por un aspecto o por otro de la vida de Pound sino que se ha hecho con un gran criterio y con todo lo objetivo que se puede ser en estos casos, también cuando se conoce personalmente al biografiado.
Dejaré el principio, lo demás me lo guardo.

yo solo persigo el amor, lo demás me da igual
¿os cuento un cuento?
yo solo persigo el amor
el amor con o sin calcetines
con o sin guantes
espero que mis padres me engendraran con amor
no lo sé,
os juro que no lo sé

papá...
mamá...
¿me engendrasteis con amor?

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