sábado, noviembre 21, 2009

Me he ido con la Noche del brazo.
La Noche me decía, empujándome, ¿dónde me llevas?
y yo le decía estate quieta, ¡vamos!
como me gusta que me acompañe Noche por un par de garitos en Lavapiés
Ella no me pide nada y me mira con sus dos ojos negros llenos de estrellas
Le digo que allá está Venus, allá arriba... "si sigues el camino llegas a La Alhambra"
Ella me mira y sonríe y me dice ¡Ya estás borracho!
La intento besar pero ella evita que me acerque, me evita como siempre, crujen sus ropas
Ella me importa mucho, mucho
No es fácil cuando me quedo callado y se acerca a mí. Te lo juro no es fácil
Y sus ojos cambian de color: cielo, ropas, un trozo de papel, la canción aquella cantada por un par de tipos...
En el último momento le pido que se venga conmigo
Se levanta de la cama y le veo el culo
Sus tetas son de porcelana
¡Noche, noche!
Coge sus ropas
Amanece

1 comentario:

Laluz dijo...

A mi la noche, siempre me abandona en la esquina. Justo antes de subir a casa.

Con las ganas que tengo yo, de verla el culo..