Debes escribir como si no existiera nadie más que tú en todo el Universo
El único ser sobre la Tierra
El único habitante de este país que eres tú mismo
Y como si lo que fueras a escribir le interesara a todo el mundo y fuera absolutamente necesario el que lo escribieras.
Por la calle te puedes sentir el ser más despreciable y despreciado del mundo por escribir lo que escribes pero al llegar a casa, al lugar donde te pongas manos a la obra, al ponerte frente al papel o la pantalla en blanco, debes saber que eres la única persona del mundo, que es necesario lo que escribes, que nada ni nadie te puede interrumpir y que todo lo que existe fuera ha dejado de hacerlo.
Tal vez te des cuenta de que no eres tú cuando escribes de esa manera. Solo es un comienzo. Olvidarte de todos y de todo. Olvidarte de ti mismo para pensar que has de dejar de escribir para ponerte a rezar, ¿sabes rezar? ¿has aprendido a rezar?
Sr. Tañabuey
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