viernes, diciembre 06, 2019

Otra historia más

Ayer por la noche, después de hablar sobre el relato de Circe del maestro cronopio Julio Cortázar en un taller literario sito en el barrio de Retiro, anduve trasteando en la TV hasta que encontré el programa cultural de Antonio Gárate, Canal 24h (de lo mejor que se hace en cultura en estos tiempos, y mira que es poco) donde se encontraban dos amigos de Rafael Sánchez Ferlosio que comentaban, entre otras muchas cosas, que tuvo un acierto fino, muy fino cuando Ferlosio les hizo saber, allá en plena guerra de las Malvinas (1982), tras la lectura de unos cuantos periódicos (y no solo nacionales, por supuesto, no sé si recordáis lo que ya dije el día que conocí a Sánchez Ferlosia en aquella cafetería en La Prospe) que los británicos, o la gran Margaret Tatcher mejor dicho, había mentido a la hora del hundimiento del famoso barco de la Royal Navy, justificando así por fin su entrada en la guerra. Sí, así fue cómo la Tatcher crearía un ambiente nacionalista suficiente como, por ejemplo, acabar con las protestas mineras en su país que eran furibundas y crear esa máquina especulativa y voraz que supuso la Bolsa de Londres o como queráis llamarlo. Todo ello con el "patriotismo" que es el refugio de los miserables.
Luego se recomendó el libro Campo de Marte, sobre el papel del ejército, etcétera. También, el día anterior estuvo la simpatiquísima Silvina Magari, o "La Fea", con su nuevo trabajo. También fue agradable el encuentro porque a esta mujer la recuerdo de aquellas noches en El Aguardiente (en esos años de 2009, minuto arriba minuto abajo) en Lavapiés, cuando aún no estaba tan "joodido" y tan cool este barrio (lo estaba, sí, pero bueno ya se sabe) pero esto es solo un comentario de un viejo al que no le gusta el "progreso". Será porque ya conoce el estúpido final de que todo, al final se convierte en dinero, en "money", en esa gentrificación que finalmente lo vacía todo de vida, de esa misma vida que ha ido atrayendo a esos locos que han ido poco a poco poblando el lugar y que luego han salido "escopetaos". Pero esta es otra historia.

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